domingo, 29 de mayo de 2022

San Isidro (parte III): Álvaro Alarcón, Ángel Téllez, un puñado de bichejos indecentes y una tarde vergonzosa.

El lunes 23 se lidiaron novillos de Fuente Ymbro para Manuel Diosleguarde (obispo y oro), Jorge Martínez (azul marino y oro) y Álvaro Alarcón (blanco y plata). Sin duda la mejor corrida de lo que llevamos de feria: embistieron todos. Así que los que descartaron este festejo del abono, se han perdido una tarde para el recuerdo. El sexto fue premiado con la vuelta al ruedo. Tarde ventosa que complicó mucho la lidia a estos tres muchachos. Aún así, la tarde fue más que interesante. Los chicos no se dejaron nada en el tintero y lo dieron todo. Hubo volteretas y hubo orejas. Como en las novilladas de antaño. Abrió cartel un torero cuyo pueblo natal lleva en su nombre artístico. Manuel es de Salamanca y abandera ese toreo clásico que tienen los matadores de la Vieja Castilla. Este salmantino mostró que está más que preparado para tomar al alternativa. Toreó con mucha clase a su primero. Mató bien y cortó una oreja un tanto justita. En el cuarto se aceleró y quiso abrir la puerta grande antes de tiempo. Ya lo decía Juncal: "las prisas, pa´ los delicuentes y los malos toreros". En vez de plantear una faena con cabeza, quiso ir rápido. Evidentemente se equivocó. Y viendo el nivel mediocre de Madrid, de no ser por la espada, posiblemente hubiese habido petición... y seguramente una puerta grande. Jorge Martínez mostró un valor seco pero estuvo toda la faena a merced del segundo novillo. Hay que torear y mostrar actitud pero él atropelló la razón. El buen quinto arrolló al murciano. Tiene este chico buen concepto pero hay que pulir fallos y corregir muchos defectos. Entre el viento que soplaba y que dejaba mucho hueco en la muleta, el novillo se le coló y le propinó un porrazo escalofriante. A pesar de todo, pegó derechazos muy rotundos y algún natural que hicieron sonar olés roncos en los tendidos. La estocada con la que cerró el trasteo fue muy buena pero incomprensiblemente el presidente no atendió la petición y no dio el trofeo. Con la de orejas simplonas que hemos visto estas dos semanas, cuando de verdad alguien la merece, no se concede. De traca. Cerró cartel un muchacho que estuvo sensacional. Mostró un gran concepto del toreo y unas maneras muy personales. A pesar de las carencias de todo novato, entendió perfectamente a su novillo y cortó una oreja. Los muletazos que pegó al sexto novillo fueron más que macizos. Madrid rugió. El toro fue excelente y Alarcón lo toreó a placer. Mató muy y cortó dos orejas. La segunda fue un poco excesiva. Así que con tres orejas salió a hombros un novillero en San Isidro, cosa que no ocurría desde que Pepe Moral lo lograse en 2007. Y otro dato curioso para los amantes de las estadísticas: de cuatro puertas grandes que ha habido desde que empezase la temporada, tres han sido conseguidas por toreros forjados en escuelas de Castilla-La Mancha. Felicidades a Ricardo Gallardo por la gran tarde que nos ha dado. 

El martes 24 se lidió un encierro de Valdefresno. Grandes y serios pero vacíos de todo. Un año más esta ganadería charra pegó otro petardo gordo en Madrid. En una tarde muy ventosa actuaron Daniel Luque (carmín y oro), José Garrido (salvia y oro) y Juanito (malva y oro). Daniel Luque estuve muy firme en el quinto. En un palmo de terreno construyó una faena a base de oficio y conocimiento. A pesar de la nula condición del mulo, el sevillano mandó y consiguió robar al Valdefresno varios muletazos de mucho mérito. Garrido, gran capotero, pegó unas chicuelinas llenas de torería. En el quinto pechó con otro mansazo de solemnidad. Cerró la terna Juanito. Desde el gran Víctor Méndez, lleva Portugal muchos años sin dar grandes toreros. Juanito estuvo insulso. Cierto es que su lote no dio posibilidad alguna. Pasó de puntillas por Madrid. 

El miércoles 25 torearon Diego Urdiales (verde y oro), Roca Rey (azul y oro) y Ginés Marín (Rioja y oro). Diez días exactos han pasado desde que Ginés recibiera una fuerte cornada en esta misma plaza. Pero el jerezano quiso volver y dar la cara ante la afición venteña. Los toros eran de Fuente Ymbro... Después del éxito cuarenta y ocho horas antes... Petardo gordo. Mansos, flojos, alguno debió ser de vuelto... Tarde ya olvidada. Hizo mucho viento. El que no triunfa en Madrid, es porque no quiere. Basta con irse a los bajos del 3 y del 4 y ponerse a hacer un toreo bullanguero que es el que te puede dar orejas: espaldinas, pases de pecho, desplantes... Roca, inteligentemente, se fue a esa parte del ruedo y toreó al mansurrón quinto. Otro habría tomado las de Villadiego, pero el peruano mostró actitud de figura del toreo. Ni un pero se le puede achacar a RR en lo que a ganas se refiere. Un toro sin entrega alguna, acabó en la misma puerta de toriles y Andrés, aprovechando el viaje de sus flojas embestidas, hizo un toreo de fuegos artificiales. Y claro, los tendidos, emocionados, coreaban olés al unísono. De no ser por la espada, habría cortado la oreja o dos, viendo el nivel de Madrid. Diego pegó un sainete, sobre todo en el cuarto, un toro con alguna posibilidad pero no lo quiso ver. Ginés, con la herida aún cicatrizando hizo un esfuerzo enorme. Su primer toro fue inválido y en el que cerró la tarde mostró ganas y corazón. Le queda una última tarde: el miércoles 1 con Morante de la Puebla y un sustituto de Emilio de Justo.

Lo mejor de la tarde fueron los pares de banderillas de Javier Ambel.

El jueves 26 se lidió un encierro de Juan Pedro Domecq (JP). Después de dos días infumables, las apuestas ni cotizaban: nadie daba ni una peseta porque esta ganadería echase un toro medianamente decente. Torearon Morante de la Puebla (obispo y azabache), Juan Ortega (verde y plata) y Pablo Aguado (sangre de toro y oro). La corrida de la vergüenza: ¿A qué se debe que los toreros elijan esta ganadería una vez, y otra, y otra sabiendo que está en un momento infame ya que de los seis festejos que ha lidiado este año, es decir, que de 24 reses no ha embestido ninguna? ¿Por qué los aficionados vamos a ver semejante esperpento si sabemos de sobra que va a salir mal?¿Por qué Florito va a Lo Álvaro a buscar toros cuando sabe de sobra que hay muchas ganaderías que seguramente tendrán mejor ganado que JP? ¿Por qué el público pitó al final del festejo a los toreros (a Morante sobre todo, por ejemplo) cuando la bronca monumental tenía que haber sido para el ganadero (que se fue de rositas) por la infame moruchada que ha traído a Madrid y que tenía que haberse oído hasta en La Giralda?¿Cómo puede ser posible que los sinvergüenzas de Canal Plus digan que Madrid venía predispuesta a reventar la corrida y que si las cosas han salido mal es casi culpa de la afición venteña?¿Cómo es posible que después del sainete que ha pegado Juan Pedro aún tenga los bemoles de decir que ha habido cosas que le han gustado de alguno de los toros lidiados? ¿Por qué los veterinarios y el equipo presidencial no rechazaron esta basura después de todos los toros examinados para poder traer algo más decente a la feria más importante que existe?¿Quiénes son los culpables? ¿La empresa por comprar semejante porquería? ¿El equipo gubernativo por aprobarla? ¿Los toreros por pedirla o la afición por gastarse los cuartos en semejante esperpento y volver a llenar una plaza las veces que sea necesaria para ver esta cantidad de toruchos cuasi mortuorios?

El viernes 27 se lidió el segundo encierro de la ganadería de Victoriano del Río: flojos y descastados. Llevamos cuatro días pésimos en lo que ha ganado se refiere. Diego Urdiales (verde y azabache), Alejandro Talavante (marfil y oro) y Ángel Téllez (blanco y plata) que sustituía a Emilio de Justo. Durante estos días se comentó hasta la saciedad quien debía ser el sustituto del extremeño. ¿Téllez por los mejores naturales de lo que llevábamos de feria?¿Tomás Rufo por abrir la puerta grande?¿El Juli para redondear un cartel de lujo? A final la empresa llamó a Ángel así que el madrileño cumplió su segundo paseíllo en San Isidro. Torear, eso hizo Téllez, y de verdad. Con apenas una decena (o menos) de festejos toreados desde su alternativa en abril de 2019 en Guadalajara, estuvo inmenso. Sus mejores pasajes con el capote fueron unas gaoneras en el segundo toro. No se movió un ápice. Las gaoneras es una suerte de mucha dificultad, aun así, le salió bordado y pasándose el animal a milímetros de la taleguilla. Cuando se torea con esa verdad y con ese empaque, Madrid se entrega. El lote que le tocó fue el más potable del encierro que mandó Victoriano desde Guadalix. Se puso en el sitio, sin reservas, donde queman los pies, y donde uno se pasa al toro cerca de verdad. Ángel se puso de frente para citar y embarcando al animal con los vuelos, llevaba al toro en la panza de la muleta. Los muletazos fueron macizos. Madrid rugió. Unos derechazos estupendos, los naturales de ensueño, los torerísimos remates ya fueran los trincherazos o el pase de la firma, unos pases de pecho de pitón a rabo, el cierre por doblones y....las malas estocadas. No terminó de redondear esos dos faenones con unos espadazos acordes a la obra realizada, pero con la de faenas presenciadas desde el 8 de mayo, sin duda la de más valor, más completa, más rotunda, ha sido ésta. Salió a hombros tras cortar una oreja en cada toro. Da un golpe en la mesa, se postula como revelación de San Isidro y un torero al que hay que poner a funcionar desde ya. Sobre Diego y Tala... no hay nada que comentar. 

Cerramos esta semana el sábado 28 con "La corrida de la Juventud": Toros de Luis Algarra para Román, Gonzalo Caballero y David de Miranda (Corinto y oro, gris perla y oro y azul y oro respectivamente). La Beneficencia de 2019, la encerrona de Ureña el sábado pasado... llevamos un puñado de tardes asquerosas, pero lo de hoy ha sido repugnante. La primera "Corrida de la Juventud" acabó en un encontronazo hooligan. La plaza de Madrid ha pasado de ser la Monumental Pachá, a Las Ventas Metropolitano. Gonzalo Caballero fue culpable de convertir la plaza de Las Ventas en un estadio de fútbol. Espectáculo indigno que se vivió en los tendidos después de morir el cuarto toro, y además, con Román camino de la enfermería por una cornada en el gemelo derecho. Salió el madrileño a parar a su primer toro y recibió una voltereta  pero siguió toreando mellado en facultades. Pasó a la enfermería y volvió en el quinto. Simplón y ante un lote que apenas dio opciones, Gonzalo no pudo hacer más. Después de este esperpento dantesco, Gonzalo sale muy tocado de San Isidro. 

Volvían a Madrid, Román tras su espeluznante percance en 2019 con el toro de Ibán y David de Miranda tras su puerta grande esa misma feria. Román pechó con un gran toro que salió en primer lugar y estuvo por debajo. Un toro para cortar dos orejas y al final Román acabó cortando una oreja muy barata. Su segundo fue un toro bronco y con el que había que estar muy firme. Si hubiese peleado un poco más, podría haber abierto la puerta grande. Se pidió la oreja, pero ante la lógica y escasa petición, el presidente hizo caso omiso. David de Miranda quiso pero no pudo. Tuvo un lote insulso. El onubense busca torear con naturalidad y verticalidad. Sin toros para ello, pasó de puntillas por Madrid. 


martes, 24 de mayo de 2022

¿Lo sabes?

 Hoy os pregunto sobre Diego Urdiales.


1. ¿En qué año debutó en La Maestranza?
A. 2010.
B. 2011.
C. 2014.

2. ¿Con quién confirmó su alternativa en Las Ventas en julio de 2001 con toros de Javier Guardiola?
A. Carlos Escolar "Frascuelo" y Jesús Pérez "El Madrileño".
B. José Luis Bote y David Luguillano.
C. Manolo Amador y Luis de Pauloba.

3. En 2007, tras seis años en el ostracismo, actuó en Logroño sustituyendo a un compañero que no pudo estar ese día debido a una cornada recibida días antes. Indultó a Molinito, que era de Victorino y ese triunfó le volvió a poner en el circuito. ¿ A qué torero sustituyó?
A. Luis Bolívar.
B. Antonio Ferrera.
C. Pepín Liria.

4. ¿Qué leyenda del torero dijo de él: "Si estuviera en activo bebería en las fuentes de Diego Urdiales" aludiendo a que es un referente por su toreo tanto para los toreros actuales como para los chavales que empiezan?
A. Paco Camino.
B. "El Viti".
C. Curro Romero.

5. Datos correctos de su alternativa.
A. Logroño, 22 de septiembre de 1997.
B. Santo Domingo de la Calzada, 23 de julio de 1998.
C. Dax, 15 de agosto de 1999.

6. En 2008 fue torero revelación en San Isidro gracias a un faenón a Dormidito, que pesó 645 kg. Toreó sustituyendo a Serafín Marín porque inicialmente no estaba contratado para esa feria. ¿A qué ganadería pertenecía aquel toro?
A. La Dehesilla.
B. Lozano Hermanos.
C. Carmen Segovia.

7. ¿Cuántas Goyescas hasta la fecha ha toreado en Madrid?
A. 4.
B. 5.
C. 6.

 8. Aparte de Logroño, ¿en qué otra localidad riojana hasta la fecha ha indultado un toro?
A. Calahorra.
B. Alfaro.
C. Haro.

9. En el año 2012 sólo toreó trece tardes. ¿Cuántas fueron en plazas de 1º?
A. 1.
B. 6.
C. 8.

10. Ha ganado el prestigioso Zapato de Oro como novillero con caballos en la feria de su Arnedo natal?
A. Sí.
B. No.




1a, 2a, 3c, 4b, 5c, 6c, 7a, 8b, 9c, 10a




domingo, 22 de mayo de 2022

San Isidro (parte II). Los naturales de Ángel Téllez, una puerta grande de chichinabo, un espectáculo bochornoso y una estocada de ley.

El lunes tuvo lugar la novillada de El Conde de Mayalde el lunes 16. En el cartel figuraban Santana Claros (obispo y oro) y dos novilleros que están gozando de muy buen ambiente estas últimas temporadas: el mejicano Isaac Fonseca (verde y oro) por su actitud y Álvaro Burdiel (marino y oro) por su toreo clásico. Lo mejor fue la disposición de Fonseca: quites ajustadísimos y muy complicados por el viento que sopló, una estocada sensacional a un toro que debía ser devuelto pero el presidente no quiso, el darle tiempo al quinto toro para sacar todo lo que tenía... Lástima la espada. Si al quinto lo mata, hubiera cortado una oreja. Novillero muy a tener en cuenta. El malagueño Santana Claros apuntó retazos de buen toreo y unas finas maneras. 

El martes 17 llegó desde Jaén un encierro de la ganadería Araúz de Robles. Hasta dos toros tuvieron que devolverse en el primero de la tarde. Hasta ese día, posiblemente fue el encierro más desigual de presentación de todo lo que llevamos de feria. Tarde plomiza y muy larga. Trenzaron el paseíllo Joselito Adame (celeste y oro), Pepe Moral (verde y oro) y Ángel Téllez (blanco y plata).
Disposición total del mejicano, con un ambiente muy a la contra. Duramente exigido, fue injustamente tratado. Pechó con dos toros que tuvieron recorrido y el azteca ligó varios redondos por el pitón derecho. En el quinto, sufrió un revolcón espeluznante pero a pesar de quedar magullado, siguió en el ruedo. Añado que el toro requería algún puyazo de más, pero Adame dejó al toro muy entero para toda la faena. Y lo pagó. Planteamiento desastroso, ese toro en los primeros compases de la lidia, mostró mucha dificultad por el pitón izquierdo. Lo que hizo Joselito en vez de empezar en cercanías e ir tanteando al animal, empezó precisamente por ese lado y de largo; es decir, le dio toda la ventaja al animal. El toro hizo caso omiso de la muleta y arrolló al matador. Acabó dando una vuelta al ruedo. Los momentos más toreros corrieron a cargo del toledano. Téllez pegó un manojo de naturales excepcionales al tercero. Encajado, siempre de frente, siempre en torero. Meciendo la muleta con suavidad y embarcando al animal con los vuelos y llevándolo hasta detrás de la cintura... Toreo de muchos quilates. Madrid vibró. Un toro suavón y noblote, embistió con mucha calidad a las telas de Ángel. La vuelta que dio el manchego fue más que merecida. 
Pepe Moral lleva un par de ferias pasando de puntillas. Su lote fue imposible pero tampoco consiguió hacerse con ellos. El sevillano estuvo a punto de ver como volvía al corral el segundo de la tarde. Anduvo perdido. 
Otro de los momentos álgidos de la tarde tuvo de protagonista a Fernando Sánchez. Puso a Madrid en pie por sus pares de banderillas. 

El miércoles 18 no estuve. Torearon López Chaves, Javier Cortés (negro y oro) y Jesús Enrique Colombo (marino y oro) y por lo que me han contado hubo un toro muy importante de la ganadería de Pedraza de Yeltes: Huracán, lidiado en tercer lugar. Javier Cortés no terminó de redondear su faena y Colombo estuvo muy vulgar poniendo banderillas.

El jueves 19 se llenó la plaza para ver a José María Manzanares (azul y oro) y a Roca Rey (azul y oro) para confirmar la alternativa a Fernando Adrián (sangre de toro y oro). Impresentable encierro de Victoriano del Río, tanto en juego como en trapío. Con semejante ganado, poco se pudo hacer. Fernando Adrián se ganó esta tarde por ser triunfador de la Copa Chenel, certamen que se celebra con toreros que gozan de pocas oportunidades por los pueblos de Madrid. Roca pegó un arreón en el sexto. Se puso encimista y pegó banderazos por doquier intercalando con desplantes y adornos a los tendidos de sol. De no ser por la espada, Andrés habría salido a hombros por segunda vez. 

El viernes 20 repetían tarde "El Juli" (azul bondí y oro) y Alejandro Talavante (obispo y oro). Confirmó la alternativa el toledano Tomás Rufo (blanco y oro). Llegaba a su presentación venteña como triunfador de Sevilla ya que salió a hombros por la Puerta del Príncipe. Si no me equivoco, desde que tomó la alternativa en septiembre en Valladolid ha salido a hombros todas las veces que ha toreado. Pero ayer no salió a hombros, le sacaron. Un público bullanguero regaló al de Pepino una puerta grande vulgar y baratísima. Templó y toreó con gusto a su primero, pero se pasó al toro no por la M·30, sino por la M-50. Y me da rabia, porque él puede cortar dos o tres orejas en Madrid toreando rotundamente. Los que le vimos de novillero en esta plaza en 2019 o el año pasado en Carabanchel somos conscientes de su dimensión como torero y su gran proyección. En el sexto tiró de desplantes y adornos jaleado por los tendidos de sol exactamente igual que hiciera Roca Rey la tarde anterior. Quitando algún muletazo suelto fue una faena muy insípida. La diferencia es que la espada entró mal, pero entró, y la gente, exaltada, pidió una oreja que fue concedida. Se consumó un esperpento que la espada impidió 24 horas antes. Si esta faena la hace en agosto o septiembre, no sale ni a saludar. 
El Juli, que al igual que Tomás, también venía de Sevilla tras salir a hombros por la Puerta del Príncipe. Demostró por enésima vez que es un privilegiado y sacó todo lo que tenían los semejantes mulos que le tocaron en suerte. Volvió a matar mal. Importante actuación en conjunto de su paso por Madrid. Tala estuvo frío en su primero al que despachó de un bajonazo. Sabe de sobra que Madrid exige y en el quinto sí dio la talla. Se puso de rodillas y el comienzo de faena duró varias tandas. Se la jugó pasándose al animal por los muslos y pegándose un arrimón de más calado que el de Rufo. Perdió la oreja por matar mal. 
Volvió a bordarlo en banderillas Fernando Sánchez. Petardo ganadero. Aburrido encierro que trajo el ganadero Justo Hernández, además de muy mal presentado. Llenazo hasta la bandera en tarde nublada pero muchísimo bochorno. Un día más, dio vergüenza ver el comportamiento del público. 

El sábado 21 se encerró Paco Ureña (salmón y oro) en solitario. Después de ser el triunfador de la última temporada sin pandemia (2019), no están contando con él. A la desesperada, ha pedido esta gesta confiando en remontar su carrera y recuperar el crédito que le llevan negando desde ese año. 
La tarde fue un despropósito en todos los sentidos. Se enfrentó a seis toros de diferentes ganaderías: La Ventana de El Puerto, Domingo Hernández, Adolfo Martín, Juan Pedro Domecq, José Vázquez y Luis Algarra (este fue rechazado por la mañana y remendaron el encierro con un toro de Victoriano del Río). Indecentes. Una vez más la presentación del ganado fue indigna. Y de mal juego. El esperpento vivido en el quinto toro, demostró por enésima vez la decadencia de la plaza madrileña. Los abonados mayores han ido falleciendo, los que quedan están aburridos o cansados y dejan de ir... Consecuencia: ese criterio uniforme de aficionados de toda la vida se ha perdido y ahora reina una opinión diferente cada día. 
Poco importan los toros, eso es secundario, lo importante es beber como cosacos rusos. Una cosa es entrar con una cerveza y otra es llevar bolsa, sacos de hielos, coca-colas y botellas de ron para ponerse ciegos. El público quiere jarana. Quiere triunfalismo. Cayeron cuatro gotas en ese toro y la gente jaleaba cada pase de Ureña como si fuesen goles. Le regalaron la oreja. La última moda en Las Ventas es lanzar almohadillas, sea cuando sea y pase lo que pase. Sin venir a cuento y con el torero y su cuadrilla en el ruedo con el toro de por medio, empezaron a lanzar almohadillas los tendidos tres, cuatro y cinco. De hecho un banderillero recibió un almohadillazo. Y otro energúmeno lanzó una lata de cerveza que acabó en el centro del ruedo. Por eso apoyaré siempre al tendido 7. Siempre. Muchas veces se equivocarán y meterán la pata, pero ese rigor y esa exigencia que demandan (no solo ellos si no también otros sectores de la plaza donde hay grandes aficionados) es la que da importancia a la plaza de Madrid. Esos sinvergüenzas que insultan al Siete cada dos por tres los días de figuras y les recriminan lo que protestan, son los que lanzan almohadillas ya sea en las primeras filas o desde las andanadas. Y luego piden respeto gritando esos lemas tan manidos: "baja tú", o "hay un hombre un jugándose la vida". Las almohadillas de Madrid son gordas y pesadas. Un día ocurrirá una desgracia. Dios no lo quiera. La pena es que poco hay que comentar en lo que a la corrida se refiere. El momento más inspirado de Ureña fueron unas preciosas chicuelinas en el segundo toro rematadas con una larga. 

Llevamos quince días y y todavía quedan dos semanas. El domingo 22 torearon David Fandila "El Fandi" (azul marino y oro), Manuel Escribano (tabaco y oro) para confirmar la alternativa a Leo Valadez (verde manzana y oro). Un encierro de Torrealta que tuvo que ser remendado con dos toros de García Jiménez fue noblón para la muleta y destacó el primer toro por su buen juego en el caballo. Varios toros no tenían la presentación adecuada para una plaza como es la de Madrid. 
Valor de Valadez. El mejicano, a pesar de ser un torero recién doctorado, y con la evidente falta de oficio que tiene un torero nuevo, mostró valor y muchas ganas durante todo el festejo. Quitó por gallosinas en el primero y lopecinas en el sexto. No se dejó nada en el tintero llegando a sufrir un revolcón espeluznante en este toro. Consiguió pegar algún que otro natural de buen trazo y rubricó la faena, posiblemente, con la mejor estocada en lo que llevamos de feria. La oreja que se pidió quizá era muy justa, pero por ese soberbio espadazo, no la protesté. Valadez y su paisano Isaac Fonseca (que precisamente esta misma tarde debutaba en Sevilla y ha salido a hombros tras cortar dos orejas al sexto) han mostrado más ganas y actitud que muchos toreros patrios que también están empezando y que por ello necesitan arrear para ser toreros importantes. Hay que espabilar. Los dos mejicanos han mostrado hambre y ganas de querer llegar lejos. Ahí lo dejo para reflexionar... 
Se juntó a tres matadores banderilleros y el espectáculo fue más bullicioso y espectacular que puro en lo que es en sí el arte de banderillear. Los 18 pares que se vieron fueron más bien vulgarotes. Fandi anduvo simplón y Manuel, actitud y ganas no le faltan, pero no es un torero exquisito. Tras una faena intrascendente, se pegó por su cuenta una vuelta al ruedo que fue protestada. 
El viento condicionó mucho la tarde. Después del esperpento del día anterior, mis amigos y yo mostramos desde la Grada 6 una pancarta que rezaba: MENOS ALCOHOL Y MÁS EDUCACIÓN. 




martes, 17 de mayo de 2022

San Isidro (parte I): Faenón de El Juli y la raza de Ginés Marín.

Tras dos años sin feria, volvimos a Las Ventas ilusionados con una nueva edición del ciclo isidril. El primer cartel estuvo compuesto el domingo 8 por Daniel Luque (marino y oro), López Simón (gris marengo y oro) y Álvaro Lorenzo (fucsia y oro). Daniel venía con la vitola de ser uno de los triunfadores de Sevilla y voló con gusto y temple los trastos de torear. Tarde plomiza en la que Álvaro Lorenzo cortó una oreja y recibió un pitonazo de poca gravedad pero que no le impidió continuar la lidia. López Simón debe ponerse las pilas. El día que en la Escuela explicaron que hay que medir las faenas, él faltó, si no, no me lo explico. Trasteo interminable al noblón sexto. Cuando el murmullo aumenta en el ambiente, la gente masca pipas como si no hubiera un mañana y se pone con el móvil a mirar desde "twitter", "Instagram", "WhatsApp" o hasta el "Comunio" es cuando muchos toreros deciden que es un momento fabuloso para alargar faenas que no llevan a nada. Alucinante, pero es real.
 
El lunes 9 se lidió seis utreros de la ganadería aragonesa de Los Maños. La parte negativa fue que Arturo Gilio (celeste y oro) cayó herido de gravedad en su primero. Un encierro que tuvo muchas opciones pero cuando se traen a tres chavales con el poco bagaje que tienen García Pulido (blanco y plata), Carlos Domínguez (negro y oro) y el ya mencionado Gilio, pues poco se puede hacer.

Toros de El Pilar el martes 10 para Javier Cortés (negro y oro), Tomás Campos (grana y oro) y Francisco José Espada (blanco y plata). Oreja de fuste para Javier con un toro muy interesante lidiado en primer lugar: Bastardero. Una buena estocada premió la labor del torero de Getafe. Segunda tarde de Tomás Campos tras la del domingo de Resurrección. Ni templó ni mandó. Tarde para olvidar del extremeño. Por su parte, Espada se pegó el arrimón en el tercero y se puso pesado en el sexto con un largo trasteo. Lo decimos y repetiremos. Es fundamental medir las faenas. Es de primero de Cossío. Cansa y aburre ver a un torero pegar pases, pases, pases, pases, pases, pases y pases sin ton ni son.

El miércoles 11 se agotó el papel con un cartel de postín: Morante de la Puebla (blanco y azabache), El Juli (azul marino y oro) y Pablo Aguado (verde musgo y oro). Casi todo el mundo lo dice: posiblemente la tarde más importante de Julián en el ruedo capitalino. Estuvo inmenso. De no ser por la espada, habría salido el madrileño por segunda vez a hombros en Madrid. Una faena para enseñar en las escuelas taurinas. Aquel toro de La Quinta no valía un duro pero gracias a Dios cayó en las manos de Julián. Poco a poco, fue cociendo un faenón que puso a todos de acuerdo. Las Ventas se entregó a Julián. Chispazos de Morante como algún torero detalle ya fueran con capote o muleta y algo que ya nos está acostumbrando desde la temporada pasada: dirigirse a la plaza desde el hotel en coche de caballos acompañado de su cuadrilla. Pablo Aguado naufragó. Se mostró incapaz con el lote que le tocó.

El jueves 12 volvía Gonzalo Caballero tras sus dos brutales cornadas de 2019. Tarde sin historia. Los toros de El Torero fueron de espectacular estampa. Antonio Ferrera (verde y oro), Daniel Luque (blanco y oro) y Gonzalo (celeste y oro) se estrellaron contra un complicado encierro.

También volvía Talavante tras su parón. Firmó la exclusiva en la que no iba a actuar en cualquier otra plaza española que no fuera Madrid. El viernes 13 toreó con Juan Ortega (corinto y oro) mano a mano un decepcionante encierro de Jandilla. Talavante (azul noche y oro) cortó una oreja muy pobre al tercero de la tarde. Esperado como pocos, tenía Alejandro todo a favor para triunfar. En el quinto, en vez de jugársela y apostar, estuvo apático. Esperábamos mucho más.
Inédito Juan. Su lote no fue un dechado de virtudes pero tampoco quiso ni intentarlo. Mal en Valencia, mal en Sevilla y mal en Madrid. Más que discreto su comienzo de temporada. Decepción. Aún le queda una tarde.

El Domingo 15 torearon Curro Díaz (sangre de toro y oro), Álvaro Lorenzo (gris plomo y oro; sustituía a Emilio de Justo, herido el domingo de Ramos) y Ginés Marín (azul turquesa y oro). Un encierro desigual de hechuras y comportamientos esperaba en los corrales. Un toro fue devuelto y salió un sobrero de José Vázquez. Si hay que destacar algo, sería la hombría de Ginés. Mediada la faena del tercero, Ginés recibió una cornada de dos trayectorias, una de 20 y la otra de 25 cm. Estoico, aguantó en el ruedo sin mirarse, sin venderlo, sin ningún gesto tribunero a la los tendidos... Continuó como si nada hubiera pasado. Finalizada la faena, volvió igual de tranquilo al callejón para darle al mozo de espadas muleta y espada, y tras lavarse se fue por su propio pie a la enfermería. Deseamos a Ginés (y a Arturo Gilio) una rápida recuperación. Bochornosas orejas a dos faenas intrascendentes de Curro y Lorenzo. Madrid está muy barato y ayer lo volvimos a comprobar.

Breves apuntes: en general bien las cuadrillas, salvo alguna lidia catastrófica, estamos viendo buenas bregas y grandes pares de banderillas. En cambio, quitando algún puyazo aislado, está siendo un comienzo de feria muy mediocre en el tercio de varas.

Salvo algún toro destacado como el primero de El Pilar o la novillada de Los Maños, está siendo una feria muy pobre en lo que ha ganado se refiere. Y los toros buenos que se están lidiando, no terminan de ser cuajados por sus respectivos matadores. 

Ya lo ha denunciado la Asociación el Toro de Madrid, y yo me uno a esta protesta tantas veces sea necesario: el vergonzoso estado de la plaza. Goteras, barandillas oxidadas, suciedad, humedades... Recordamos que es un edificio protegido y a punto de cumplir un siglo de historia. ¡BASTA YA!

Orejas baratas, animales inválidos que no son devueltos, cambiar tercios de banderillas sin los palos reglamentarios... Hay que poner orden en el palco de Las Ventas.

Finalizo con un tema que está dando mucho debate: las terrazas que se montan cuando acaba el festejo. Lo que hace un par de años se planteó como un encuentro de jóvenes para hablar de toros y hacer amigos, ha desembocado en ver Las Ventas convertida en una macrodiscoteca, la música rebotando en todo el edificio incluso antes de morir el sexto toro o, como ya se ha dado el caso, con un torero en la enfermería en la mesa de operaciones; borrachos orinando tanto en pasillos o escaleras aumentando la suciedad y dando una imagen demencial y preocupante.


sábado, 14 de mayo de 2022

Toros para el recuerdo (IV).

TOROS IMPORTANTES FERIA DE SEVILLA 2022.

Un repaso a los toros más destacados de la Feria de Abril. Por Jaime Cabezas Tejero.

- “Chismoso”. Ganadería de Santiago Domecq.

Negro de capa. Encaste Torrestrella y Domecq Díez. Lidiado por Alfonso Cadaval en 3º lugar el día 27 de abril.

Toro bravo, noble y con clase en las embestidas, en especial por el pitón derecho. La presentación no era acorde con la categoría de la plaza, muy fuera de tipo y anovillado en la cara y cuartos traseros.

Alfonso Cadaval que consiguió cortar un trofeo, tuvo la intención de hacer un toreo por bajo y con gusto, sin embargo, el animal destacó por encima de él en todos los momentos de la faena de muleta, teniendo en cuenta la prontitud del toro y su bravura. Oreja muy benévola.

- “Gracioso”. Ganadería de Santiago Domecq.

Castaño Burraco de capa. Encaste Torrestrella y Domecq Díez. Lidiado por José Garrido en 4º lugar el día 27 de abril.

Toro encastado y noble, de tremenda exigencia para su matador. Una muy buena presentación muy en el tipo de la ganadería. José Garrido estuvo por debajo de tan importante oponente, salvo en algunos tramos de la faena de muleta donde se alcanzaron cotas más altas. Fue premiado con una merecida oreja.  

-“ Zafia”. Ganadería de Jandilla.

Negro mulato de capa. Encaste Domecq Díez. Lidiado en 6º lugar por José María Manzanares el 29 de abril. La presentación del toro era acorde a su procedencia, toro armónico y bien hecho.

En la muleta se mostró bravo y repetidor, exigiendo continuamente distancias, temple y mando. Sorprendentemente, Manzanares no se acopló en ningún momento de faena, la cual transcurrió entre enganches, mala colocación e incapacidad. Toro que en otras temporadas, le hubiera bastado para cortar las dos orejas.

-“Pobrecito”. Ganadería de Victorino Martín.

Cárdeno de capa. Encaste Saltillo y Marqués de Albaserrada. Lidiado en 5º lugar por Antonio Ferrera el día 30 de abril.

Toro de gran clase y nobleza en la muleta, pero falto de la casta que caracteriza a la ganadería. Antonio Ferrera dejó tandas muy rematadas con la mano izquierda, sabiendo aprovechar la buena y larga embestida del toro que exigía firmeza a su matador, pero a su vez, carente del carácter encastado de la casa.

-“Forajido”. Ganadería de Victoriano del Río.

Negro mulato de capa. Encaste Domecq. Lidiado en 4º lugar por Julián López “El Juli”, el día 2 de mayo.

Toro bravo en el caballo y con calidad añadida en la muleta. Faena de "El Juli" de mucho oficio y mando, donde fue capaz de templar y de poder en todo momento las embestidas del astado.  

-“Ballestero”. Ganadería de Garcigrande.

Negro de capa. Encaste Juan Pedro Domecq Solís. Lidiado en 4º lugar por Morante de La Puebla el día 7 de mayo .

Comportamiento incierto en el tercio de varas y banderillas, pero posteriormente con un comportamiento encastado y exigente en la muleta, con embestidas bruscas por momentos.

Morante de la Puebla lo entendió a la perfección, firmando una faena basada en la templanza, la ligazón, el ajuste y la estética del artista. Tuvo la importante capacidad de acoplar su toreo a las exigentes embestidas del toro, protagonizando el punto más vibrante y emocionante de la feria. Dos orejas de mucho peso.

-“Remontista”. Ganadería de Miura.

Negro mulato y listón de capa. Procedencia directa de la originaria Casta Cabrera. Lidiado en 5º Lugar por Manuel Escribano, el día 8 de mayo. 

Único toro mal presentado de la corrida, caracterizándose por sus hechuras anovilladas principalmente en los cuartos traseros, sin estar terminado de definir ni de rematar.

El animal tuvo un comportamiento en la muleta bravo y con mucha clase, en especial por el pitón derecho. Manuel Escribano supo dar las distancias necesarias y ejecutar un torero de mando basado en prolongar y templar las embestidas del toro, siempre con la mano baja, dominando a su oponente.





lunes, 2 de mayo de 2022

Larga vida a un toro bravo.

Una nueva entrega de mis recuerdos en la plaza madrileña. En esta ocasión retrocederemos en el tiempo hasta llegar al año 2006. Uno de los pasajes cenitales de esa temporada tuvo lugar en el mes de mayo. Al hilo de la Corrida Goyesca que tendrá lugar hoy en la capital, esta vez en "Sucedió en Madrid", el protagonista de estas líneas no va a ser un torero sino un toro. Si hubiese que hacer que una lista con los más bravos de los últimos años, éste estaría sin duda en los puestos más altos. Y si hablo de toros bravos y corridas goyescas, los más aficionados sabrán que me refiero a Mulillero, número 11, de 525 kg y nacido en noviembre de 2001. Un extraordinario animal de Adolfo Martín. Su matador fue el madrileño Luis Miguel Encabo.

                       

Salió en segundo lugar y sus primeras reacciones en el ruedo aclaraban que iba a vender muy cara su vida. Que iba a combatir hasta el último aliento. Exigiendo y siempre muy humillado en el capote, tuvo Encabo que sacarlo hacia los medios. No dejó que le torease a la verónica.
Una vez parado el toro, sacó el Usía el pañuelo y ordenó que saliesen los picadores. El afortunado fue el luso Rafael da Silva. Buen lidiador y sabiendo del espectáculo que protagonizan estos toros en el peto, lo lució el matador poniéndolo de largo. El animal era un torrente de bravura y en el caballo lo demostró. Tres emocionantes puyazos pusieron a Las Ventas en pie. Y como guinda, puso el matador al toro en suerte para un cuarto puyazo pero ordenó al picador dar la vuelta a la vara para que no fuese picado por cuarta vez. El toro lo habría aguantado con creces. Casi desde los medios y a la voz del portugués, fue Mulillero como una exhalación. Ovación clamorosa a Rafael cuando el presidente cambió de nuevo el tercio. Maravilloso.
Finalizado el primer tercio, se adornó el torero en unas chicuelinas finales antes de coger las banderillas. Consumado rehiletero, desplegó Luis Miguel sus facultades en tres diferentes suertes del arte de banderillear: de dentro a afuera, de poder a poder y por los adentros. Brilló con solvencia en los tres pares.
 Se volvió a cambiar el tercio y en la muleta el toro iba a más, embistiendo con prontitud, galope y humillación. No había que perder el tiempo. Había que apostar y ponerse de verdad. O lo cuajas o te hunde. Para consagrarse. El de Adolfo era un tejón. Fiero y encastado. En el último tercio se vio una de las principales cualidades de este encaste respecto a otros: lo rápido que aprenden. Encabo desbordado. No podía con él. Se fue a por la espada y tras perfilarse la dejó trasera y baja. Mala estocada. Rodó el toro y en el arrastre las mulas se lo llevaron con todos los honores. Pitos al torero.

Que Dios me libre de un toro bravo, que del manso me libro yo. Es éste un dicho que desde antiguo se comenta cuando hay un toro de semejante magnitud y el torero hace lo que puede. ¿Estuvo mal Encabo? No, quizá el planteamiento de la faena no fue el idóneo pero queda claro que el burel estuvo por encima de su matador. Ahora que están tan de moda los indultos, en cuanto un toro embiste con nobleza y suavidad a una muleta la gente pide su perdón. ¿De verdad son conscientes de lo que conlleva un indulto? No podemos premiar la dulzura y la docilidad. Un toro no puede ser fácil y que sirva como dicen los periodistas en prensa y televisión. No señores, parafraseando al Marqués de Albaserrada un toro no sirve, no es un camarero. Un toro planta batalla y hay que saber LIDIARLO. Si recordamos toros fieros y exigentes, muy pocos son los toreros que libraron ese duelo con triunfo. Basta con visitar el patio de mayorales de La Venta de El Batán y comparar las reses premiadas con el resultado artístico de sus matadores.
¿Era de indulto Mulillero? A mi juicio, sí. Y eso dijo el ganadero en más de una ocasión. No le dieron ni la vuelta al ruedo.
En una tarde de mayo en la que los madrileños recordábamos la lucha de aquellos héroes contra las tropas napoleónicas en 1808, en la calle de Alcalá otra batalla hizo que un toro de lidia pasase a la historia. La emoción y el peligro encarnados en un animal bravo.
Larga vida a Mulillero.