domingo, 29 de marzo de 2020

Solo ante la historia.

Solo ante el peligro, como Gary Cooper en aquel mítico "western" enfrentándose a una banda de forajidos por las calles de Hadleyville, hizo Iván Fandiño un paseíllo que ha entrado en los anales del toreo. Con mis amigos accedí a Las Ventas y nos diseminamos por aquellos tendidos de granito en busca de una localidad para presenciar aquella tarde que marcaría una época. De hecho la marcó, porque recuerdo perfectamente que unas semanas antes se anunció el festejo en un acto que se realizó en la carpa instalada en el ruedo y se llenó pues además de la prensa, asistimos numerosos aficionados. Durante esas semanas hasta el 29, en el mobiliario urbano incluso en las salidas de las seis autovías se anunció un festejo que sería histórico.

                                              Cárdenos y Jaboneros: Iván Fandiño, Domingo de Ramos 2015. La Gesta

Por fin llegó el día. Amaneció el día lluvioso, pero a pesar de ello y nada más salir del Metro para reunirme con mis amigos se palpaba que la expectación era absolutamente brutal. De hecho, si no recuerdo mal, las taquillas agotaron el papel unas jornadas antes. Según muchas personas no se recordaba que un festejo fuera de los abonos importantes como San Isidro y Otoño crease tanto ambiente. Pero la cosa no quedó ahí: uno de los alicientes que hizo que esta corrida diese que hablar antes, durante y después de la misma fue el ganado. Fueron seis alicientes, seis ganaderías que eligió el diestro de Orduña para medirse ante la dura afición madrileña. No fueron seis hierros cualesquiera, fueron ni más ni menos seis ganaderías predilectas de la afición más torista: Palha (sangre de la línea 'Pinto Barreiros', D. Isaías y Tulio Vázquez y Oliveira Irmaos y otra línea por D. Baltasar Ibán Valdés), Partido de Resina (encaste Pablo Romero), Victorino Martín (Albaserrada), Cebada Gago (Núñez), José Escolar y Adolfo Martín (ambas encaste Albaserrada).

Resultado de imagen de primillo cebada gago

Primillo de Cebada Gago. Melocotón de capa, herrado con el nº 7 y 470 kg.

A las seis en punto de la tarde se abrió el portón y el vizcaíno rompió plaza vestido de gris plomo y oro. En cuanto saludó al presidente la ovación fue atronadora. Madrid agradeció el gesto de Iván sacándole a saludar. A partir de ahí fueron sucediéndose los toros y si la cosa no empezó bien, a mitad de la corrida la tarde decayó y no remontó. Fandiño no superó el bache. Yo recuerdo ver un Fandiño derrotado, que a pesar de las ganas que mostraba en el paseíllo y ver que en los primeros toros surgían dificultades a las que había que sobreponerse; quedaba un hilo de esperanza en que la tarde acabase bien, confiando en las capacidad de este torero para enfrentarse y solventar la situación ante esta complicada empresa, el juego de los toros aguó la ilusión del torero y de los aficionados. Recuerdo unas buenas verónicas, un quite por navarras, varias tandas de naturales... y también que aquel día la espada no funcionó. El sainete que dio con el acero fue antológico. Si la situación no estaba para tirar cohetes, un buen uso del estoque habría suavizado el resultado.

                             

Iván se estrelló esa tarde. En los dos últimos toros le vi desdibujado y sin ideas. Esa apuesta pesó mucho, pero cuando no hay materia prima, nada se puede hacer. El juego general de los seis toros fue decepcionante. Acabó el festejo yéndose Iván por donde vino; entre una fuerte división de opiniones y alguna que otra almohadilla que lanzó desde los tendidos aquel que no valoró la enorme gesta de este matador. Gran parte del público despidió duramente a un torero que sin trampa ni cartón hizo realidad los deseos de miles de aficionados: matar seis toros de ganaderías con un importante historial ante la cátedra venteña. Y esas protestas las recriminaron aquellos aficionados que agradecieron el gesto de Iván. 



Ese 29 de marzo fue una máxima apuesta que no tenía precedentes. Fue un arriesgado reto en el que Iván Fandiño y su apoderado Néstor García lucharon contra aquel sistema que reina en el mundo de los toros. Y lo hicieron solos. No les importaba. Ir con la verdad por delante era más satisfactorio que tener que ser moneda de cambio entre empresarios y mercaderes del toreo. Habría quien se alegrase del fracaso de este dúo pero el triunfo de esa corrida empezó dos semanas antes. Con el anuncio de la corrida y la plaza abarrotada hasta la bandera vendiéndose todas las entradas en pocas horas. Así recordaré eternamente como en la primavera de 2015 desde una grada de la plaza de Las Ventas donde por primera vez en la historia, hubo un tío que se jugó la vida libremente y en vez de buscar la comodidad de un triunfo con hierros más asequibles, se las vio con esas ganaderías que dejan sin aliento. Quedó ese día en la memoria de miles de aficionados por aquella gesta legendaria.
Gracias Iván.



El toro de Adolfo. 


Lanzó la moneda y salió cruz.


(Fotos: Las Ventas y Ana Escribano)


Imagen

domingo, 22 de marzo de 2020

Los forcados.

Hoy os voy a contar un poquito sobre otro de los muchos ejemplos que existe en la inmensa variedad de tauromaquias populares: los forcados portugueses.

¿Qué son los forcados?

En primer lugar hay que explicar que los forcados eran aquella guardia que usaba la forca, es decir un utensilio similar a un bastón con dos puntas en un extremo que usaban con el fin de proteger en el palco a las autoridades en la corridas reales. De ahí que fuesen conocidos como forcados.
Junto al rejoneo es el mayor exponente de la tauromaquia de nuestra vecina Portugal. Hay que decir que se hacen llamar amadores: es decir, gente no profesional que lo hace por amor al toro. No cobran por ello y se juegan la vida igual que cualquier otro matador de toros. Los poco que reciben es para cubrir gastos y una posterior cena con amigos y familiares. La actuación de forcados data aproximadamente de 1836 durante el reinado de María II y hasta 1915, fecha en la que actuaban en solitario, comienzan a surgir los primeros grupos de amadores. Por mencionar a alguno podríamos hablar de los amadores de Santarém (el más antiguo), de Moita, Elvas, Portalegre, Coimbra, Moura, Vila Franca de Xira, Évora, Alcochete, Lisboa, Montemor-o-Novo... Debido a la emigración lusa hacia el nuevo mundo, es habitual ver grupos de amadores en Méjico y en los estados americanos fronterizos con éste.

                            Resultado de imagen de forcado portugues"

¿Cómo es una lidia de forcados?

Se denominan pegas. Un grupo de amadores se compone de ocho miembros y colocados en fila de a uno en el centro del ruedo provocando la embestida del toro: el Forcado de cara es el que expone más y corre mucho más riesgo, ya que como el nombre indica, es el primero en recibir el choque y primer encontronazo con el astado y su objetivo es lanzarse al cuello del animal y agarrarlo, quedando el forcado entre los pitones; el forcado de primera ayuda, muy importante porque tiene que sujetar al que ya está agarrado al toro; dos forcados de segunda ayuda, que sujetan a los anteriores; el rabillador, que se agarra a la cola, recostándose en ella con las piernas abiertas, frenando la embestida; y los tres forcados de tercera ayuda que culminan la operación. Así que el objetivo de esta tauromaquia es simple, ni más ni menos consiste en inmovilizar al animal. Como es costumbre en Portugal, los toros están enfundados para minimizar los percances. A pesar de ello, son habituales: las fracturas de huesos, golpes en la cara, boca, nariz, dientes, costillas... son las lesiones más frecuentes que sufren los forcados.


En cuanto a la vestimenta hay que decir que es la única variedad de toreo popular en la que sus protagonistas lucen un uniforme. Éste está compuesto por unas medias de hilo de color blanco, unos pantalones cortos a la altura de la rodilla de color camel rematados con una cinta de raso de color rojo, camisa blanca de manga larga, corbata roja, chaqueta y un fajín. La vestimenta se completa con unos zapatos y una barreta, que es el nombre que recibe el característico gorro que lucen y al igual que la montera en el vestido de luces, la barreta está considerado como lo más preciado por un forcado.

forcados

Hay que tener mucho valor para enfrentarse a un toro bravo. En general, el toreo popular consiste en saltar y evitar al animal usando el cuerpo para recortar y sortear sus embestidas. Estos hombres valientes hacen todo lo contrario. Van de cara a enfrentarse a un animal totémico; y se lanzan contra él aún a riesgo de su vida para derrotarle. Son un ejemplo de pundonor y vergüenza torera. Ser forcado es sinónimo de valentía y de amor al toro.

Resultado de imagen de forcado"


lunes, 16 de marzo de 2020

Una trayectoria sin final.

Un 9 de marzo pero de 1988 en el patio de cuadrillas de la plaza de toros de Castellón, un matrimonio enredaba por el patio de cuadrillas y de pronto la mujer le dijo a su marido: -Mira, un niño disfrazado de torero. Y su marido, que sabía cómo estaba alborotando el cotarro taurino aquel crío contestó: no, es un torero disfrazado de niño. Aquel infante era ni más mi menos que Enrique Ponce Martínez, preparado para debutar con caballos. Al mundo vino en Chiva (Valencia) el 8 de diciembre de 1971, pero al toreo nació en Navas de San Juan (Jaén), que es tierra de olivos y ganaderías bravas. Un año antes y como las grandes figuras, empezó su carrera con doblete pues debutó en público en Sabiote el 26 de agosto del 85 y esa misma noche toreó en Linares. El 10 de agosto del 86 luciendo un vestido blanco y plata hacía el paseíllo en la plaza de Baeza para debutar con el chispeante y empezar una más que prometedora carrera taurina. Enrique Jiménez Mena, Juan Ruiz Palomares, José Fuentes  acompañados de otros taurinos de Navas de San Juan apostaron por este valenciano para encumbrarle en lo más alto del toreo.


Su trayectoria novilleril fue meteórica y cada tarde que actuaba daba argumentos para demostrar que él no era uno más. Toreó 33 festejos en 1988 y su logro más importante fue ganar el prestigioso Zapato de Oro que se celebra en la localidad riojana de Arnedo. En 1989 actuó en 65 festejos y cortó 68 orejas. Un año después en Valencia y acartelado con José Miguel Arroyo "Joselito" y Miguel Baéz "Litri" tomó la alternativa en su tierra. El 16 de marzo del 90 se doctoró con Talentoso de Puerta Hermanos. Al igual que muchos matadores, que surjan contratos tras la alternativa es difícil y Enrique no toreó. Sólo actuó dos días más en dicha plaza y en la madrileña Cadalso de los Vidrios. El 28 de julio vuelve a estar anunciado en un cartel y lo hace en la feria de San Jaime de la capital valenciana acompañado de Roberto Domínguez y "El Soro". La ganadería elegida en un principio fue la de Paco Galache pero en la finca cuando embarcan dicho encierro en el camión, un animal muere y otros dos se lesionan. Esas tres reses son sustituidas por otras tantas de El Toril e inexplicablemente, las dos figuras presentan partes médicos y se caen del cartel. Ponce en un gesto de valor se ofrece a la empresa y mata él solo aquel encierro. Cortó dos orejas al primero y una al último. Eso fue lo de menos porque su capacidad y su arrojo fueron determinantes. Ese triunfo le catapulta y entra en el circuito. En septiembre se presenta en Madrid y confirma la alternativa. El cartel fue el siguiente: Toros de Diego Garrido para Rafael de Paula y Luis Francisco Esplá. Al año siguiente torea dos tardes en Madrid (Los Bayones y Celestino Cuadri) y se presenta en Sevilla. El día de la Paloma torea en La Maestranza y cinco día después actúa en Bilbao. Corta dos orejas a un toro de Torrestrella y sale a hombros. La crítica es unánime.



Un año después, o sea 1992, torea en San Isidro la corrida de Samuel Flores en la Beneficencia con José María Manzanares y César Rincón. Enrique sale a hombros en Madrid por primera vez en su carrera. Vuelve a Bilbao y corta tres orejas en esta ciudad vasca, ante dos torerazos como Ortega Cano y César Rincón. En Murcia indulta a Bienvenido de Jandilla y en Madrid mata en Otoño sin pena ni gloria seis toros. Ese mismo año actúa en 100 corridas de toros y corta 110 orejas. Desde entonces no bajó del centenar de corridas por temporada. Famosa es la marca que dejó "El Cordobés" en 1971. Toreó 121 festejos y Ponce se propuso en batir ese registro pero una de esas cornadas a principios de su carrera le impidió conseguirlo.

1993: 110 tardes  y 135 orejas.
1994: 114     "          172     "
1995: 120     "          174     "
1996: 110     "          172     "
1997: 108     "          159     "
1998: 104     "          136     "
1999: 108     "          175     "
2000: 101     "          118     "
2001: 100     "          137     "

Unas cifras que no están al alcance de nadie. Torear esa cantidad de festejos con las figuras de aquel entonces, con los jóvenes que venían dispuestos a todo, todas las ganaderías, en todas las plazas y salir airoso, demuestran la capacidad del diestro valenciano. Su siguiente año importante fue 1996. En pleno San Isidro se enfrenta en una faena mítica a Lironcito de Valdefresno. Un año después vuelve a saborear la gloria en Madrid. El dos de mayo y vestido de goyesco ante toros de Juan Pedro Domecq y Victorino Martín vuelve a salir en volandas por la calle de Alcalá.



Esa misma temporada y rememorando la tragedia de uno de los toreros más legendarios que ha habido, actuó en Linares cincuenta años después de que Islero arrebatase la vida a Manolete: toreó la corrida de Miura, lo hizo vestido de rosa y oro y en uno de sus toros entró a matar en el mismo lugar que lo hiciera Manolete en 1947. Ese día cortó un trofeo. A finales de la década surgen dos madrileños que amenazan la hegemonía de Enrique: José Tomás y "El Juli". Pero el de Chiva aguanta el tirón y mantiene su cartel. En 1999 y después de años de intento por fin lo consigue: Ponce abre la ansiada Puerta del Príncipe. Aquel 26 de septiembre se retiraba su amigo "Litri" y cerraba la terna "El Juli". En esos últimos centenarios sigue sin mostrar cansancio o debilidad. En el año 2002 y después de esa locura de cifras baja la cantidad pero no la calidad, torea menos pero mejor. Dos graves cornadas recibe ese año: Sevilla y León. Ese mismo año en San Isidro vuelve a salir a hombros en Madrid por tercera vez. Lo logra ante toros de José Luis Pereda y Javier Pérez Tabernero. Los años siguientes son un rosario de triunfos en muchas plazas y ante toros de diferente condición.  Sigue el levantino forjando su leyenda. En 2006 borda el toreo en Sevilla, en 2008 en Bilbao y en 2010 torea en Ronda y en su Goyesca celebra un número redondo: dos mil festejos toreados. Apabullante. En 2017 vuelve a salir a hombros en dos plazas de primera: por cuarta vez en Madrid y por sexta vez en Bilbao.
Y en ultramar las plazas americanas conocen bien a Enrique. Una de sus plazas predilectas es el enorme embudo de Insurgentes. En La Monumental mejicana ha cuajado muchos toros y dejado faenas para el recuerdo. En la Méjico ha llegado a cortar dos rabos y está considerado como "consentido" de la afición.


A pesar de haberse enfrentado a tantísimos toros, el número de cornadas que ha sufrido es insignificante si se compara con la trayectoria de otros toreros. Han sido muy pocas, pero sí de gravedad: Cieza (Murcia) y Méjico DF en 1993, Sevilla y León en 2002, Alicante en 2004, El Puerto de Santa María (Cádiz) en 2005, en su plaza de Valencia cayó herido en 2014 y 2019. Ocho percances tras enfrentarse a más de 4000 reses.

En el aspecto ganadero hay que decir que ha toreado todos los encastes y ha triunfado prácticamente con todos los hierros de cada uno. Si repasamos su carrera, vemos que hay una variedad enorme: Sánchez Fabrés, Alcurrucén, Juan Pedro Domecq, Victorino (llegando a matar él solo un encierro de este hierro en su tierra y salió a hombros) y Adolfo Martín; Celestino Cuadri, Veiga Teixeira, Torrestrella, Marqués de Albaserrada; los Atanasios de El Puerto de San Lorenzo y Valdefresno son dos ganaderías que Ponce conoce bien, al igual que Sepúlveda, en horas bajas pero que en los 80 y 90 era predilectas de las figuras. Miura, con los de Samuel Flores ha toreado y triunfado en las principales plazas de España y Francia. Atanasio Fernández es otra muy conocida por Enrique y un larguísimo etcétera. Para acabar esta parte ganadera, nuestro protagonista ha indultado en torno a 50 animales desde que José le cediera los trastos en 1990.

Entre los muchos premios que pueden recibir un torero en su trayectoria, uno de ellos es la prestigiosa Oreja de Oro, que Radio Nacional de España otorga al mejor de cada temporada. Ponce ha llegado a ganar siete (1992, 1993, 1994, 1996, 1997, 2016 y 2017). En el año 2007 fue premiado con la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes.



Ahora daré mi opinión y pondré algunos puntos de su vida a debate. Ponce es máxima figura y si hubiese que hacer una lista con los mejores de todos los tiempos, indudablemente él formaría parte de ella. Eso es innegable. No es el valenciano torero de mi predilección y que me mueva para ir a verle torear. ¿Más de cuatro mil toros estoqueados y apenas un puñado de percances? ¿Se debe a sus conocimientos o a que no arriesga tanto como otros? No deseo el mal a ningún torero pero estas cifras me hacen pensar que a lo mejor no se la juega tanto como otros. Otros buenos matadores con muchisímos menos festejos tienen el doble de percances. Que si usa el pico de la muleta para torear y el gran tamaño de sus trastos de torear han sido cuestionados por no pocos aficionados. Y otra cuestión es la cantidad de indultos que tiene en su haber. El que haya visto torear a Ponce muchas veces, habrá observado que suele torear a media altura dejando al animal que vaya a su aire sin obligarle, por lo que esos toros sin sometimiento, pueden aguantar las eternas y soporíferas faenas modernas. Con ello se consigue que si el toro repite sin cesar una y otra vez una cantidad enorme de muletazos, la gente emocionada pedirá el perdón. Un antiguo dicho de los hombres de campo afirmaba que un indulto en la plaza es un error por parte del ganadero. Y yo pienso, ¿Es Enrique un descubridor de malos ganaderos? En el caso opuesto de las grandes figuras actuales, el mejor ejemplo es Morante, ya que es de las pocas figuras que no tiene indultos en su haber. Su toreo de mando y sometimiento hace que los animales no aguanten la exigente lidia del sevillano.

Natural de Enrique Ponce a su segundo toro de Juan Pedro Domecq este jueves en Zaragoza

Y aunque más arriba hablo de ganaderías, las figuras se quedan en unas cuantas y no salen de ellas. Saldrán los pesados de turno diciendo que son figuras y pueden elegir. Sí, muy bien, pero ¿no gustaría volver a verle con diferentes encastes a lo largo de un año? En este aspecto, la sangre Domecq es la que más ha lidiado en los últimos años pero también es cierto que puntualmente ha estoqueado diferentes encastes estas últimas campañas. Pero le exijo más, porque es figura y sé que puede hacerlo. No pido que mate la camada entera de Miura o Dolores Aguirre por ejemplo, pero de vez en cuando como sigue haciendo incluso toreando esas ganaderías duras en las plazas de primera en vez de plazas menores sería un gesto hacia esos aficionados que pedimos a las figuras abrir ganaderías. Diferentes sangres y comportamientos que harían que siguiésemos a lo largo de un año disfrutando de la capacidad lidiadora de Enrique.
Y añado su faceta más humana. Su presencia en los festivales benéficos que se hacen contra el cáncer u otras causas ha sido constante durante toda su carrera. Siempre apoya a aquel que lo necesite y la gestión de su carrera compartiendo cartel con todos los matadores de las diferentes generaciones es de agradecer. Nunca ha puesto pegas a ningún compañero y ha toreado en todos los sitios.

Una carrera inacabada, nadie sabe cuando dirá adiós. Me he alargado un poco y he intentado resumir pero tres décadas de trayectoria lo merecen. Pudo con los que estaban cuando él llegó, con los de su generación y con los que vinieron después. Treinta años en la cumbre, y lo queda. Espero que hayáis conocido un poco más a uno de los toreros más importantes que ha habido en el planeta de los toros: Enrique Ponce Martínez.
Enhorabuena, Maestro.

Ceremonia de la alternativa de Ponce. Treinta años le contemplan./ APLAUSOS



sábado, 7 de marzo de 2020

¿Lo sabes?

1. ¿Qué carrera universitaria ha estudiado Rocío Romero?
A. Derecho.
B. Enfermería.
C. Magisterio.

2. ¿Datos correctos de la alternativa de Cristina Sánchez?
A. Zaragoza, 23 de abril de 1996.
B. Alicante, 24 de junio de 1996.
C. Nîmes, 25 de mayo de 1996.

3. ¿Quién fue la primera mujer en cortar dos orejas en Las Ventas a una misma res?
A. Conchi Ríos.
B. Ana Infante.
C. Juanita Cruz.

4. Tras años de prohibiciones y autorizaciones, ¿cuándo se permite definitivamente a las mujeres torear?
A. 1964.
B. 1974.
C. 1984.

5. De estos matadores, ¿Quién ha tenido una madre torero?
A. Rubén Pinar.
B. Fortes.
C. Daniel Luque.

6. ¿Qué carrera universitaria ha estudiado Lea Vicens?
A. Psicología.
B. Veterinaria.
C. Biología.

7. ¿En qué plaza de 1º preside Anabel Moreno?
A. Málaga.
B. Sevilla.
C. Zaragoza.

8. María Jesús Gualda dirige en la provincia de Jaén una ganadería de encaste Coquilla y es...
A. Los Ronceles.
B. El Cotillo.
C. El Añadío.

9. ¿Qué ganadería dirige Isabel Lipperheide?
A. Dolores Aguirre.
B. Guadalmena.
C. Rocío de la Cámara.

10. ¿Qué ganadería dirige Cristina Moratiel?
A. Baltasar Ibán.
B. Gabriel Rojas.
C. Adelaida Rodríguez.




1b, 2c, 3a, 4b, 5b, 6c, 7b, 8c, 9a, 10a


jueves, 5 de marzo de 2020

Michelín.

Una vez más, en el tuitendido salta la polémica. Los puristas critican que la mítico marca de neumáticos Michelin al organizar un evento privado en la Monumental de Las Ventas coloque su famoso logotipo (de unas dimensiones muy considerables) en el arco de la Puerta grande. Hay mucha gente entre la que me incluyo que considera que esta plaza es una catedral profana y que por ello "mancillarla" con eventos o con publicidad de cualquier índole es rozar el sacrilegio. También me considero un aficionado que defiende determinados tipos de detalles los cuales hay que cuidar al máximo porque son los que hacen que el toreo sea algo absolutamente único.

Aún así, no me disgusta que una marca de prestigio como es Michelín enarbole su icono en la primera plaza del mundo. También hay quien piensa que habría sido mejor poner el muñeco en la explanada o en otro lugar que "atentara" lo menos posible para no profanar dicha plaza. ¿Dónde queda esa línea que separa la "profanación" de una publicidad? ¿Cuántas veces nos hemos quejado de que el toreo es algo que sobrevive al dinero que genera la taquilla y lo difícil que es buscar ayuda de empresas privadas que beneficiarían a muchos pueblos modestos a sacar sus ferias adelante? ¿Cuántas veces se han intentado hacer proyectos y al solicitar ayuda de dichas instituciones, éstas no han querido colaborar por la imagen que pueden dar a sus clientes? Es hablar de toros y mucha gente muestra indiferencia o rechazo. Cada vez que ha habido algún ataque de cualquier forma al toreo por parte de una empresa, los aficionados hemos protestado contra dicha institución por retirar dichas colaboraciones. ¿Es por vergüenza? ¿Es porque puede bajar la popularidad de la empresa? ¿Es porque pueden perder clientes? En vez de agradecer el apoyo que muestra una marca a nivel mundial para con el toreo, nos ponemos a criticar. No debemos tirar piedras en nuestro propio tejado y más en los tiempos que corren. De buen nacido es ser agradecido.

Merci Michelin.



Imagen



martes, 3 de marzo de 2020

Una tarde en la Santamaría.

Hoy escribe en este rincón una firma de categoría: mi tía Salud Hernández-Mora. Corresponsal en la capital colombiana desde hace mucho tiempo donde ha firmado infinidad de artículos y reportajes en diferentes medios de comunicación, hoy colabora con estas líneas para Berrendo en Cárdeno.

Triunfal cierre en la Santamaría de Bogotá.

La feria de la Libertad concluyó este domingo con una gran entrada en los tendidos para presenciar un cartel internacional: el francés Sebastián Castella, el peruano Roca Rey y el diestro nacional Juan de Castilla. Los toros, de juego interesante eran de la ganadería de Juan Bernardo Caicedo. El segundo fue premiado con la vuelta al ruedo y el sexto fue indultado.

Castella es un torero que por diferentes razones está muy ligado a Colombia así que es una tierra en que él se siente muy querido y esperado. En sus plazas ha triunfado en repetidas ocasiones. Su primer toro se lesionó en el caballo y fue devuelto. Salió un sobrero ante el que Sebastián se entregó totalmente. Brilló con el capote y con la muleta redondeó varias series con la mano derecha. También toreó con la mano izquierda pero estos naturales tuvieron menos calado que los derechazos. Cerró la obra con una gran estocada premiando su labor con las dos orejas. Ante el cuarto de la tarde emocionó a los tendidos con sus habituales pases cambiados por la espalda. En el momento álgido de la faena, el toro también se lesionó y Sebastián lo mató con otra buena estocada. Para desquitarse la espinita, pidió el de Béziers el sobrero. Ante éste toro que hizo séptimo en el orden de la corrida, toreó el francés con mucha clase perdiendo los trofeos debido a que falló con el acero.

                 Imagen

Roca Rey triunfa donde torea y no suele defraudar. Está el peruano en estado de gracia, es el torero del momento. Su faena a Zorro fue sensacional de principio a fin y cortó dos orejas. Fue éste un animal bravo y por ello fue premiado con la vuelta al ruedo. Andrés sabe como llegar al público. Supo mezclar variedad y tremendismo añadiendo además un enorme valor y una técnica prodigiosa. Ligó varias series de muletazos por cada mano y cerró con unas ajustadas bernadinas. En el quinto poco pudo hacer ante la sosa condición del animal que le tocó en el sorteo.

Juan de Castilla actuó ante sus paisanos sabiendo que toreaba con dos máximas figuras del toreo. ¡Novillero! soltó una voz desde el tendido y se espoleó el muchacho. No le gustó. Ni quería ni podía quedarse atrás. Plantó cara ante la mansedumbre y complicaciones que puso el toro de Caicedo. Jugó con los terrenos y querencias para sacar el máximo partido a su oponente. Por ello y gracias a la buena ejecución de la suerte de matar cortó una oreja.
Como el sexto fue indultado, fue premiado con los trofeos simbólicos. Juan estuvo a la altura de este animal. Lo toreó a placer, disfrutó él y los que presenciamos esa faena. Fue preciosa su labor. El momento más emocionante fueron unos maravillosos naturales y a medida que avanzaba la faena, la petición de indulto fue creciendo. Como el presidente lo concedió, este buen toro de Juan Bernardo Caicedo volverá al campo.

Wilson Chaparro “El Piña”, tras muchos años como banderillero, se cortó la coleta.

Acabó una tarde como no podía ser de mejor manera: con los tres toreros a hombros de los aficionados. A pesar de vetos políticos, de indiferencia de empresas y patrocinadores que hacen que acá la Fiesta de los toros se sostenga íntegramente con lo que se genera en la taquilla, en Bogotá y en otros tantos lugares seguiremos luchando por la libertad de ir a una plaza.


(Fotos: Salud Hérnandez-Mora y Rodrigo Urruego)


Bogotá, 1 de marzo de 2019.


domingo, 1 de marzo de 2020

Y los médicos para salvar a los toreros...

Tras Valdemorillo hace unos días, me fui a tierras castellanas a presenciar el gran homenaje que se celebró en honor de los "ángeles de la guarda" de los toreros: los cirujanos taurinos. Como dice Juncal en la mítica serie de TVE: «El mundo entero está rendido a sus pies. Todo gira en el mundo alrededor de los toros. Los músicos existen para inventar pasodobles toreros, los poetas para cantar a los toreros, los médicos para curar a los toreros, los arquitectos para construir plazas de toros, los pintores para pintar toreros y las mujeres para querer a los toreros». Aquellos años locos como fueron los 90 con Jesulín como ídolo de masas, celebró una corrida en homenaje a la mujer y abarrotó de féminas la plaza de Aranjuez. Así que esta ocasión tocaba agradecer a los galenos el granito que ponen en salvar a estos héroes vestidos de seda y oro cada vez que derraman su sangre ante el rey toro.

En la plaza cubierta de Aranda de Duero actuaron Morante de la Puebla, José María Manzanares, Cayetano, Emilio de Justo, Pablo Aguado y El Rafi. Los toros lucieron el hierro y las cintas de la ganadería salmantina de García Jiménez. El festival quedó aguado por el pobre juego de los toros. Desrazados y sosos, no dieron el juego deseado. La plaza registró una gran entrada. Añado que quizá fue por el ganado ya que no dio opción al lucimiento, y es que el festejo duró dos exactas. No se hizo aburrido ni pesado. Pascual González Masegosa, cirujano de la plaza de Albacete y presidente de la Sociedad Española de Cirugía Taurina recibió una placa al romper el paseíllo.


¿Qué decir de Morante? José Antonio vino a Aranda tras torear hace escasos días en Ciudad Rodrigo. El novillo que le tocó en suerte acusó falta de fuerzas y el sevillano le dio sus tiempos y alturas. No lo agobió para que fuese a su aire. Abrió la tarde con un ramillete de verónicas y la media. Lo más torero del festival, fue verle llevar al utrero a punta de capote con una mano desde los medios hasta el caballo. Brindó al público y comenzó con unos ayudados por alto. El trasteo fue breve. Cimentado en la mano derecha ya que este pitón fue el más potable.Cerró con un macheteo por bajo y tras enterrar la oreja hasta los gavilanes cortó la primera oreja. Durante la vuelta al ruedo regaló a los cirujanos su sombrero.  


José María Manzanares posiblemente pechó con el animal más pobre del encierro. Se estrelló y poco pudo realizar. Hizo gala de su elegancia y tras un fallido intento en la suerte de recibir, entró a matar al volapié y lo fulminó de una estocada. Saludos desde el tercio.


Cayetano fue entrega absoluta. Comenzó con unos muletazos de rodillas y ligó varias tandas con la diestra para encanto de los asistentes. Varios molinetes de rodillas fueron muy jaleados y tras una estocada que necesitó varios golpes de descabello, cortó un trofeo.


Emilio de Justo hizo el toreo más clásico de la corrida y cortó dos orejas. Alanceó a la verónica con gusto y suavidad. Cuajó al animal por ambos pitones y rubricó la faena con una estocada que cayó un pelín baja. 


El gran aliciente del cartel era el también sevillano Pablo Aguado. Apetecía mucho verle. Le tocó un toro que le regaló un puñado de sosas embestidas en la que el diestro pudo lucir su personalidad. Destacó su toreo a la verónica. La res fue a menos a medida que avanzaba el trasteo y falló con el acero. Asignatura crucial que hay que mejorar. Saludos desde el tercio.


El novillero galo fue todo entrega y variedad. Quitó por chicuelinas y remató la serie con la graciosa revolera. Toreó por lopecinas para levantar el ánimo de la tarde. Siguió en ebullición pues la faena de muleta comenzó con un pase cambiado desde los medios. El novillo prometía pero se rajó. El reiterado fallo a espadas lastró los trofeos que merecía tal labor de quietud y precisión. Escuchó un aviso.


(Fotos: Tauroemoción)


¿Seguirán indirectamente recordando a Juncal? ¿Habrá un homenaje a los arquitectos o a los músicos? El tiempo lo dirá. (Anoto que aunque no fue en una plaza, Miguel Ángel Perera realizó recientemente un homenaje a los poetas, en este caso, a la Generación del 27 en el Ateneo de Sevilla). Sería sin planteárselo un maravilloso guiño a ese genio como fue José Álvarez "Juncal", interpretado magistralmente por Paco Rabal. Acabado el festival y acompañado de la mejor gente, cenamos productos de la tierra y volvimos a la capital del Reino.